La Secretaria Ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), Alicia Bárcena, hizo hoy un llamado a la comunidad internacional, y a las agencias del sistema de las Naciones Unidas en particular, a abordar las raíces y causas fundamentales de la migración con el fin de enfrentar el problema que presenta el desplazamiento de personas en diversas partes del mundo.
La alta funcionaria de la ONU moderó un panel de alto nivel sobre migración y la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible en el marco de un simposio de expertos sobre migración internacional y desarrollo [1], efectuado este martes 26 de febrero en la sede central de las Naciones Unidas en Nueva York, bajo la organización del Departamento de Asuntos Económicos y Sociales del organismo mundial (DESA por sus siglas en inglés) y el patrocinio de la oficina de la Presidencia de la Asamblea General de la ONU y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
En la sesión participaron António Manuel de Carvalho Ferreira Vitorino, Director General de la OIM; Santiago Javier Chavez Pareja, Viceministro de Movilidad Humana de Ecuador y Presidente designado para 2019 del Foro Global para la Migración y el Desarrollo; Felipe González Morales, Relator Especial de la ONU para los Derechos Humanos de los Migrantes; y Richard Blewitt, Jefe de la Delegación y Representante Permanente ante las Naciones Unidas de la Federación Internacional de la Cruz Roja.
Durante su intervención, Alicia Bárcena destacó la conexión que existe entre la migración y la Agenda 2030. “Existe la urgencia de cerrar las brechas de la migración. En esto la Agenda 2030 nos permite avanzar en las brechas estructurales y en abordar las causas que están en el fondo de los desplazamientos”, señaló. También relevó la importancia de la dimensión regional en temas de migración y la necesidad de contar con datos estandarizados y fiables que permitan a todos los actores involucrados dimensionar correctamente la magnitud de esta realidad.
La Secretaria Ejecutiva de la CEPAL explicó que la migración internacional es un fenómeno de creciente complejidad ya que hoy existen 258 millones de migrantes internacionales en el mundo, quienes están viviendo fuera de sus países de origen. Además, muchos países se han transformado en territorios de origen, tránsito o destino y los flujos migratorios intrarregionales y Sur-Sur se han intensificado en los años recientes, caracterizados por tener diferentes motivos, oportunidades y regímenes legales tanto en los países de origen como en los de destino.
Bárcena destacó también el importante ejemplo dado por América Latina en temas de migración con el amplio acuerdo de desarrollo alcanzado recientemente en el triángulo norte de Centroamérica entre Guatemala, Honduras y El Salvador.
Enfatizó además que con un manejo adecuado, la migración puede ser un motor para el desarrollo económico y la innovación, una oportunidad para intercambiar conocimiento e ideas a través de países y culturas, y un camino para que los individuos y sus familias puedan construir mejores vidas para ellos mismos y sus seres queridos.
“Las Comisiones Regionales de la ONU -entre las que se encuentra la CEPAL- podemos apoyar en los datos y en llegar al corazón del problema en términos de desigualdad y oportunidades económicas”, agregó. “Nosotros tenemos la posibilidad de ayudar en el seguimiento y el monitoreo del Pacto Global para la Migración Segura, Ordenada y Regular -aprobado en Marrakech hace un par de meses- y de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) relacionados con la migración”, dijo.
Finalmente, Alicia Bárcena remarcó la importancia de reforzar la cooperación regional en materias de migración, la producción de datos confiables y desagregados no solo por género, sino también por otros grupos relevantes de población (como los indígenas, por ejemplo), y el establecimiento de asociaciones para enfrentar el problema, tanto con el sector privado como con gobiernos, organizaciones no gubernamentales y otros grupos involucrados.